La actuación para retirar el cadillo de A Concha afectará a 65.000 metros cuadrados de superficie

Convertido desde hace años en una auténtica molestia, la presencia en el arenal de la playa de A Compostela de una especie arbustiva e invasora como es el cadillo tiene los días contados después de que ayer se iniciaran las obras para su erradicación. Estas obras, que durarán unos cinco meses y que afectarán a 65.000 metros cuadrados de la superficie del arenal, suponen una inversión de casi 530.000 euros y, además de la retirada del arbusto, también van a suponer una sustancial mejora en las pasarelas de madera y en otros servicios que se pueden encontrar en la playa.

El alcalde de Vilagarcía, Alberto Varela, acompañado de técnicos de Costas y de personal directivo de la empresa Tragsa, encargada de ejecutar la actuación, se acercó ayer a la zona en la que se van a iniciar las obras, el pinar de A Concha, donde una excavadora ya se encontraba trabajando en vallar la primera fase de la actuación. Varela reconoció allí que la obra era una vieja reivindicación de todos los usuarios del paseo marítimo y del arenal, debido a las molestias que provocaba el cadillo. “Costas está atendiendo nuestras necesidades y contamos también con el trabajo de Tragsa, empresa que ya ha colaborado con Vilagarcía en la construcción de la Vía Verde”.

El desarrollo de la obra va a coincidir con la temporada estival y con un evento como es el Atlantic Fest, algo que la empresa ha tenido en cuenta a la hora de diseñar la actuación. Así, se iniciará la actuación por el pinar de A Concha para irse desplazando por cuadrículas hacia el resto de la playa. El objetivo es que puedan convivir los trabajos con el ocio y el descanso de los vilagarcianos, habilitando pasos hacia el mar allí donde se esté actuando. La actuación consistirá en ir decapando los primeros centímetros, donde se localiza el cadillo, para ir enterrando esas capas en una serie de franjas más profundas que serán regadas con agua de mar para evitar que el cadillo vuelva a regenerarse. La intervención solo afectará a la zona seca de la playa, liberando a las zonas marisqueras. Si todo sale según lo previsto, el cadillo dejaría de ser un problema después de tantos años.

Una de las visiones positivas de la actuación es que las catas que se han realizado en toda la zona afectada por las obras indican que la calidad de la arena que se encuentra bajo la capa del cadillo es de mucha calidad, por lo que Varela confía en que “podamos regenerar y recuperar esta playa tan importante para nosotros”.

El regidor sacaba pecho de las actuaciones que se han venido registrando en A Concha en los últimos años. No en vano, la retirada de una especie tan problemática como el cadillo no es la única iniciativa. Durante el mandato de Varela también se ha procedido a la reforma integral del paseo marítimo, una obra que se acometió en varias fases y que “ahora, permite que sea usado por todos los vilagarcianos”. Recordó que, en su día, tuvieron que deshacerse de un edificio que rompía la estética de la playa y corregir los problemas que existían en el alcantarillado, donde se habían introducido grandes cantidades de arena.

Además de la regeneración de A Concha-Compostela, el grupo de gobierno de Vilagarcía también tiene como uno de sus objetivos mejorar la situación en la que se encuentran otras playas de Vilagarcía, como es el caso de O Preguntoiro y O Campanario. La primera de ellas lleva muchos años sufriendo la pérdida de arena sin que se dé con la solución adecuada, dejando a la vista las tuberías y arquetas que se encuentran en ella. Por su parte, la segunda de ellas está pendiente de que se ejecuten tareas de regeneración.

Suscríbete para seguir leyendo